Consumir alimentos frescos, principalmente frutas y verduras, es una tendencia que gana terreno entre quienes buscan mejorar su alimentación y aprovechar todas las propiedades de los alimentos. Es una buena decisión.
En marzo, el invierno entra en su fase final y aún se pueden consumir alimentos de es temporada. Sin embargo, la primavera está a la vuelta de la esquina y a nuestro alrededor podemos ver el paulatino despertar de la naturaleza y disfrutar de más horas de luz diurna.
Al empezar el segundo bimestre todavía podemos disfrutar de platillos calientes, pero conforme marzo avanza es factible incluir más alimentos frescos que depuren nuestro organismo, contribuyan a aumentar la vitalidad y nos preparen para el trabajo duro de los meses siguientes.
En marzo podemos consumir ejote, alcachofa y espárrago, y productos tiernos como haba, chícharo y ajo, ideales para cuidar el corazón y fortalecer las defensas, cebolla, que puede formar parte de ensaladas enriquecidas con rábanos, que en esta época son más pequeños, idóneos para consumir crudos y estimular la secreción de jugos gástricos.
En cuanto a las frutas, aún hay aguacate, manzana, kiwi, mango, piña y papaya. al igual que cítricos como la toronja, que quizá no ayude a quemar grasas por la mañana, pero es un buen depurativo y aporta vitamina C, la lima, limón, mandarina y naranja.
También empieza la temporada de la fresa, época de que si bien, al igual que otros productos, se puede conseguir prácticamente todo el año, su temporada natural comienza a finales También empieza la temporada de la del invierno. Un buen momento para alimentarte sanamente.
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