En medio de la selva de Quintana Roo se levanta un espacio creativo diferente, una experiencia lista para los amantes de la naturaleza y la buena comida, el Óom Bubble Boutique Hotel, con sus burbujas preparadas para ofrecer una vista de 360° al día y la noche de la jungla maya. Lejos del ruido y la contaminación se abren los sentidos, los oídos escuchan el cantar de la selva, la nariz inhala los aromas de las plantas y la tierra húmeda, el paladar está listo para una nueva experiencia como la que ofrece el chef.
Gilberto Cimé Uicab es originario de un pueblo cercano a Valladolid, Yucatán, un sitio que se caracteriza por tener la mejor gastronomía del estado, y donde la sazón se transmite de generación en generación.
“Toda mi familia se dedica al ramo restaurantero. Mi hermano, Felipe Iván, es chef encargado en Catalonia y viene de familia, todo, todo viene de la familia, tengo otros hermanos que son excelentes cocineros.”
La cochinita no podía faltar en el menú, se sirve acompañada de tortillas hechas de maíz y sazonadas con distintos recados, las hay del rojo, que se usa para la carne asada a la yucateca, y del negro, que se usa para preparar el relleno negro. Platicar con el chef Gilberto es un placer, disfruta su trabajo, describe con pasión, amor y orgullo cada detalle de su labor. El platillo que ha demostrado ser el favorito de los huéspedes y visitantes es el pulpo al sartén o a las brasas, se adoba con salsa tradicional de pipián verde y lleva detallitos de verduras frescas, un toquecito entre agrio y el picante del adobo.
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