El queso más caro del mundo proviene de los burros de los Balcanes. En 2022, una libra de pule costaba tanto como $2,500 dólares.
No es que el queso posea cualidades extraordinarias: es blanco, tiene una textura quebradiza y un sabor similar al del manchego fuerte. Durante el proceso de elaboración del queso no se agregan ingredientes costosos. Tampoco se trata de burros salvajes, sino de animales domésticos que viven en una granja ubicada en una reserva natural serbia llamada Zasavica.
Sin embargo, la leche de burra es excepcionalmente rara y difícil de producir. Una mula (burra hembra) produce solo alrededor de 1.5 a 2 litros de leche al día, mientras que una vaca puede producir hasta 60 litros. La leche de burra también contiene significativamente menos sólidos que la leche de vaca, lo que significa que se necesita mucha más leche para obtener la misma cantidad de queso duro.
Los costos de mano de obra también influyen en el precio de venta del pule. El ordeño de las burras, que se realiza tres veces al día, debe hacerse a mano, ya que no existe maquinaria de ordeño adecuada para esta industria pequeña y especializada.
A pesar de la rareza del pule y su elevado precio, su base de leche es sorprendentemente similar en composición nutricional a la leche materna humana, que millones de personas han probado de forma gratuita.
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