Lugar de paisajes campiranos, cuerpos de agua, de coloridos trajes típicos y, por supuesto, de artesanías, Amealco de Bonfil es un Pueblo Mágico, que el visitante debe incluir en su agenda al recorrer Querétaro.
Ubicado al sur de la capital, en ese municipio destacan los trabajos de alfarería. Y qué decir de sus icónicas muñecas otomíes, declaradas el 15 de agosto de 2018, Patrimonio Cultural Intangible de Querétaro.
Recorrer la cabecera municipal, saborear su gastronomía en el mercado municipal donde encontrarás las tradicionales carnitas, barbacoa de borrego o mole de guajolote, platillo típico que se ofrece cada martes, serán una experiencia inolvidable.
Es característico de los pueblos de México tener una plaza principal en donde la gente se reúne a disfrutar de las tardes en familia y Amealco no es la excepción. En su caso está rodeada de pintorescas casas y calles del siglo XVI y no estaría completa sin un templo, en este caso la Parroquia de Santa María, considerada una de las más bonitas y grandes de todo el estado
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A lo largo de las calles de Amealco se pueden apreciar las coloridas artesanías, sustento económico de muchas familias, en las que se reflejan las tradiciones y la cultura.
El Museo de la Muñeca es uno de los sitios más visitados del lugar, ahí se pueden admirar muñecas de 18 estados de la república hechas de distintos materiales como tela, madera, cartón, papel y hasta metal, aunque la otomí de Amealco es la que más destaca entre las demás; incluso, se ha convertido en un símbolo que representa a Querétaro y México.
Además de las muñecas podrás encontrar bordados y tejidos en prendas, manteles o servilletas llenas de colores.
Para hospedarse está el hotel temático Misión La Muralla, único en México, pues transporta al visitante a la época de la Revolución Mexicana. Tiene 124 habitaciones, incluidas nueve suites.
También hay cabañas con todos los servicios y, si te gusta convivir con la naturaleza, hay zonas para acampar.