La cocina mediterránea no es solo una tendencia, es un estilo de vida. Reconocida por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, esta forma de alimentarse combina ingredientes frescos, grasas saludables y métodos de cocción sencillos para lograr platillos llenos de sabor y beneficios nutricionales.
¿Por qué elegir la dieta mediterránea?
Basada en frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, aceite de oliva, pescado y hierbas aromáticas, la cocina mediterránea es ideal para quienes buscan una alimentación balanceada.
Sus beneficios incluyen:
- Reducción del riesgo cardiovascular
- Mejora del sistema digestivo
- Propiedades antiinflamatorias
- Aporte de antioxidantes naturales
Además, sus ingredientes se adaptan fácilmente al clima mexicano, lo que permite integrarla en nuestro día a día sin complicaciones.
Platillos mediterráneos que puedes preparar en casa
Ensalada griega
Pepino, jitomate, cebolla morada, aceitunas, queso feta y orégano con un toque de aceite de oliva. Refrescante e ideal para días calurosos.
Pescado al limón con hierbas
Filetes de pescado blanco cocinados al horno con romero, tomillo y ralladura de limón. Ligero, sabroso y fácil de preparar.
Berenjenas a la parmesana
Láminas de berenjena asadas, salsa de jitomate natural, queso parmesano y albahaca. Una opción vegetariana que reconforta.
Pan con hummus y aceite de oliva
Como entrada o snack, el hummus con pan pita y un buen aceite de oliva es una combinación sencilla y poderosa.
Cítricos con menta y miel
Para el postre, una mezcla de naranjas y toronjas con hojas de menta y un toque de miel natural. Ligero, fresco y digestivo.
Integrar la cocina mediterránea en tu rutina no solo eleva tu mesa, también mejora tu salud y bienestar. Comer rico, saludable y con ingredientes accesibles es posible… solo basta con mirar hacia el mar Mediterráneo y adaptar su esencia a tu cocina.
